miércoles, 25 de abril de 2018


Habilidades técnicas y personales
 Esta tarea requiere de un proceso de autoevaluación personal y, sobre todo, profesional, a través del cual resaltar las debilidades y fortalezas técnicas y personales requeridas para el ejercicio de la función directiva. 

 Desde el punto de vista de las habilidades personales, creo imprescindible poseer un alto nivel de desarrollo de la competencia emocional para afrontar la problemática diaria que se suscita en los centros, esto es, motivación, empatía y habilidades sociales y comunicativas. En este sentido, considero poseer estas cualidades de una manera innata. Asimismo, la preocupación permanente por los diferentes miembros de la comunidad educativa y la escucha activa de sus problemas e inquietudes están presentes en una práctica diaria marcada por una continua servidumbre del tiempo, que termina por postergar los tareas asociadas a la dirección al horario no regular, en pro de atender al alumnado, profesorado y familias. Además, estimo que la figura del director debe contribuir a apoyar la labor callada y desinteresada del profesorado, mostrando su apoyo  hacia los proyectos y actividades emprendidas y valorando siempre de manera positiva el trabajo realizado. De igual forma, la capacidad de escuchar debe servir de referente para incorporar las valiosas contribuciones que realizan la comunidad educativa a la mejora del centro.

  En cuanto a las habilidades técnicas, reconozco poseer un conocimiento efectivo de su funcionamiento interno, así como del contexto educativo en el que se encuentra inmerso el centro, resultado de los años de experiencia al frente de la secretaria, lo que también me ha permitido conocer de primera mano cómo se gestionan los recursos económicos y materiales del mismo. No obstante, adolezco en la gestión de los recursos humanos, esto es, en la elaboración de los  horarios del profesorado y de los grupos, función propia de la Jefatura de Estudios, pero que debe conocer y manejar la persona que se encuentra al frente de la dirección de un centro. De hecho, por mi trayectoria profesional he estado al margen de estas cuestiones y estimo fundamental adquirir la formación necesaria para ello. Del mismo modo, me sucede con la gestión de los conflictos, los procesos de evaluación o la planificación de proyectos. Por ello, tendré que trabajar para adquirir las habilidades competenciales asociadas a dichas capacidades. Por el contrario, resultado de mi experiencia profesional poseo habilidades de coordinación, comunicación y negociación. 

  En definitiva, con mi trabajo sólo pretendo poner al servicio de la comunidad educativa mi tiempo y dedicación, aportando mi esfuerzo e ilusión, para contribuir no sólo a su buen funcionamiento si no para hacer de él un Centro a la vanguardia de la sociedad desarrollada en la que se encuentra inmerso.

     Habilidades personales

     Habilidades técnicas